Por: Diego Rodarte
Con una procesión festiva, la Cuasi Parroquia de San Sebastián Mártir, en el pueblo de Tulyehualco, concluyó su Santo Jubileo dentro de la Solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo. Las celebraciones se llevaron a cabo del 14 al 16 de junio, días en los que el Santísimo Sacramento visitó los hogares de la comunidad, además de llevarse a cabo una serie de pláticas sobre la Sagrada Eucaristía.
La tarde del Jueves de Corpus, el Santísimo Sacramento recorrió las calles en una carreta enflorada conducida por una burrita, propiedad del señor Ascensio «El Pimpollo», partiendo de la capilla de la Concepción, «La Conchita», pasando por las capillas de San Antonio y San Isidro, que forman parte de la Cuasi Parroquia de San Sebastián.
El recorrido estuvo acompañado por la comparsa de chinelos «La Amistad», que alegró con su brinco el paso de Jesús Sacramentado. No podían faltar los niños portando trajes tradicionales, huacales y canastas de fruta que recuerdan a los campesinos indígenas que acudían a la Catedral de México y a las iglesias principales a bendecir sus semillas y los frutos de las primeras cosechas.
Al terminar el recorrido, el Párroco Gabriel Olmedo Gonzáles, dio la bendición con el Santísimo Sacramento y concelebró la Misa Solemne con el Pbro. Juan García, Párroco de Santiago Tulyehualco, quien recordó que la Eucaristía nos alimenta y nos fortalece para vencer las tentaciones, así como las situaciones adversas que se presentan en nuestro camino y subrayó que Jesús, en el Evangelio, nos invita a compartir con los demás y no ser desperdiciados, alimentar el espíritu y agradecer a Dios por lo que tenemos.
Durante la clausura, el Padre Gabriel Olmedo agradeció a todos los que participaron en el Santo Jubileo, a quienes recibieron al Santísimo Sacramento en sus casas y a quienes hicieron posible el recorrido, actividades con la que se busca unificar a la comunidad que próximamente se constituirá como parroquia.
Agradecimiento: Pbro. Gabriel Olmedo Gonzáles
EL COLOR DE LA FE 